El BCE manejaría una veintena de posibilidades para ampliar el alcance de sus estímulos, incluyendo comprar deuda regional y local, así como imponer dos niveles de costes para las entidades que hagan uso de la facilidad de depósitos de la institución e incluso adquirir préstamos de los bancos, aunque esta opción sería altamente improbable por el momento, según indicaron a Reuters funcionarios de la entidad bajo condición de anonimato.
El presidente del BCE, Mario Draghi, dejó claro en su última rueda de prensa que la institución examinará en su reunión del próximo mes de diciembre la efectividad de las medidas desplegadas hasta ahora, así como la necesidad de ampliarlas.
«Están tratando de figurarse qué habrá en el paquete. Hay mucha gente con opiniones diferentes», indicó un funcionario con conocimiento de las conversaciones. «Unos opinan que debería sorprender a los mercados, pero no puedes sorprender indefinidamente. Antes o después estás condenado a decepcionar», añadió.