El dólar de Nueva Zelanda estuvo entre las monedas de mejor rendimiento en los últimos días, con un impulso impensado pero que podría durar poco. El banco central de dicho país (RBNZ por sus siglas en inglés) mantuvo como era esperado la tasa de interés pero en el comunicado sorprendió al dar un mensaje indicando que la dirección es hacia una suba de tasas.
Mensaje anterior:
“A period of assessment remains appropriate before considering further policy adjustment.”
Último mensaje.
“Some further increase in the OCR is expected to be required at a later stage. Further policy adjustments will depend on data emerging over the assessment period.”
Antes decía el RBNZ que hay que evaluar antes de hacer un ajuste en la política y ahora eso fue cambiado, por un mensaje que dice que en un punto una suba en la tasa será necesario y que los cambios dependerán de los datos económicos.
En el contexto actual, es celebrado el optimismo de estos funcionarios pero es una jugada arriesgada teniendo en cuenta el débil momento de la economía mundial y que además, al ser de los pocos bancos centrales en subir la tasa de interés, podría impulsar fuertemente al kiwi en el mercado en contra de los intereses que afirman tener estos mismos funcionarios. Por otra parte, de no actuar como lo afirman podría poner bajo riesgo la credibilidad de la institución.
Los funcionarios utilizan como argumento para indicar que la moneda no se apreciará indicando que se trata de una moneda ligada a commodities. Además mencionaron la caída en el alor de los productos lácteos. ESto es cierto, pero no deja de ser una jugada arriesgada, más teniendo en cuenta que los principales destinos de las exportaciones son China y Australia.