- La legalización de la moneda en Japón ha despertado un nuevo mercado
- El endurecimiento de las regulaciones chinas ha congelado sus operaciones
¿Por qué se ha disparado el bitcoin? La criptodivisa lleva un año encadenando alzas casi diarias, y ha pasado de valer 967 dólares a principio de año a tocar los 2.760 dólares por unidad el pasado 25 de mayo. Sin embargo, la mayor parte de ese crecimiento se debe principalmente a un país: Japón, que salió al rescate de la moneda en abril al aprobar una ley que la convertía en un instrumento de pago legal. El ‘boom’ que ha vivido el bitcoin en el país nipón ha rescatado así a la moneda del golpe provocado por el endurecimiento de regulación en la vecina China.
Hace cuatro años, en enero de 2013, Japón sufrió en su propio territorio los efectos de la falta de regulación del bitcoin. Mt. Gox, una casa de cambio que actuaba también como banco para usuarios de la divisa, quebró tras anunciar que casi todos sus ahorros habían desaparecido por culpa de un ciberataque. La cantidad robada equivalía a más de 1.000 millones de dólares, una cifra exorbitante para una moneda que todavía estaba en su infancia. La justicia nipona descubrió así el lado oscuro de una criptodivisa que había pillado al Estado por sorpresa.
Para evitar que algo así vuelva a ocurrir, Japón aprobó una ley que regula a las empresas que operen con bitcoin. Desde el 1 de abril de este año, deben estar registradas, cumplir con requerimientos mínimos de capital, seguir las leyes contra el blanqueo de capitales y proteger las cuentas de cada usuario por separado, para evitar robos masivos. A cambio, el bitcoin pasa a ser una moneda de curso legal, junto al Ethereum, otra criptodivisa de funcionamiento similar.
El resultado no se ha hecho esperar. Confiados por la ley y atraídos por su rápido crecimiento, numerosos ciudadanos japoneses han decidido entrar en el mercado, disparando la demanda de bitcoins. Varias empresas, como la aerolínea Peach Aviation, han empezado a aceptar los pagos en esta moneda. Y start-ups como BitPpoint ofrecen a los pequeños comercios nipones terminales de punto de venta para gestionar transacciones en bitcoins. La locura llega hasta tal punto que en las casas de cambio japonesas, cada moneda cuesta unos 300 dólares más que en sus equivalentes occidentales, según los datos recopilados por Cryptocompare.
El ocaso de China
El ‘boom’ vivido en Japón ha provocado que viajen allí arbitrajistas dispuestos a ganar dinero con las diferencias de precio y el aumento de la demanda. El resultado es que el yen se ha convertido en la segunda moneda más negociada en las casas de cambio de bitcoins, solo por detrás del dólar. Lejos queda el país que había mantenido con vida a la criptodivisa con vida en los últimos años y que lideraba con gran ventaja las operaciones con bitcoins hasta febrero: China.
El gigante asiático ha vivido este año un camino contrario al japonés. Mientras sus vecinos tomaban medidas para fomentar su uso, el Gobierno chino se lanzó a restringir los intercambios con bitcoins. En febrero y en marzo, el Banco Popular de China ordenó a las casas de cambio cobrar comisiones por las operaciones con divisas virtuales, algo que no hacían hasta entonces. En apenas un par de semanas, el volumen de actividad de las cambistas chinas se desplomó, y el yuan pasó de suponer el 80% del mercado mundial de bitcoins a quedar por debajo del 20%. En la última semana, no llegaba al 12%.
El efecto en los precios se hizo notar. Las medidas del banco central chino hundieron los precios del bitcoin de un pico de 1.283 dólares el 4 de marzo a un mínimo de 952 el 26 de ese mes. Seis días después, Japón ocupó su sitio en el mercado mundial de criptomonedas y los precios se dispararon más de un 100%, hasta tocar su techo esta semana. ¿Cuál será el siguente destino del bitcoin?
Fuente: eleconomista.es