El EUR/GBP tuvo un particular año en el 2013 en donde subió bruscamente en las primeras semanas (llegando hasta 0,8810), luego corrigió, regresó a los máximos y en la segunda mitad emprendió un retroceso que aún continúa. El retroceso del par se dio desde niveles cercanos a una línea de tendencia bajista de largo plazo.
Esta doble visita a los máximos puede haber configurado un escenario de doble techo, aunque la suba que se dio en agosto, hace que la formación sea errática; pero para tener una referencia el objetivo de la formación se ubica en torno a 0,8000.
La perspectiva bajista seguirá mientras el precio se mantenga por debajo de 0,8415 que es por donde está cruzando una línea bajista originada en los máximos de julio de 2013. El quiebre de la misma dará señales de que un piso ha sido alcanzado. El próximo soporte de largo plazo se ubica en la zona de 0,8155/65.