El euro arrancó la semana por debajo de 1,3500 pero logró recuperarse levemente y regresó por encima; pero con un recorrido limitado, que no llegó a consolidarse por encima de 1,3530.
Horas atrás, luego de la publicación del reporte de nóminas privadas de ADP de Estados Unidos, el EUR/USD subió hasta 1,3555 pero nuevamente, como se puede ver en el gráfico, no se pudo consolidar por encima y volvió a la zona de lateralización alrededor de 1,3520.
Operadores parecen a la espera de la decisión del Banco Central Europeo y de más datos de EE.UU.
La perspectiva y el momento en una perspectiva mayor siguen favoreciendo el escenario bajista. Una suba por encima de 1,3650 le daría momento al euro, quebrando una línea bajista de corto plazo.
Por el contrario, la zona entre 1.3470 y 1,3490 sigue actuando como un soporte clave. Niveles inferiores podrían acelerar el retroceso.