En el cierre de la semana pasada, el GBP/USD rompió un canal alcista que tenía vigencia desde principios de marzo y quedó debilitado en el corto a mediano plazo.
Tras el mencionado quiebre la perspectiva de corto plazo, paso de alcista a bajista y la libra parece estar lista para más caídas.
En el gráfico de día se ve que la cotización se está aproximando a la media móvil de 60 períodos. Este promedio suele ser una nivel desde donde o bien se da un rebote o cuyo quiebre brusco abre las puertas a un descenso mayor. Por debajo el próximo soporte importante se ubica entre 1,5180 – 1,5200; seguido por 1,5050/65.
Para remover algunas presiones bajistas el GBP/USD deberá de subir por sobre 1,5350. Recién una consolidación por encima de 1,5410 le daría cierto momento al par.