Los malos datos de Europa, incluyendo del Reino Unido pesaron sobre la cotización de la libra, que el martes estuvo entre las de peor rendimiento en todo el mercado.
La caída del GBP/USD ocasionó una rotura de una línea de tendencia alcista de corto plazo. Tras lo cual el par llegó hasta 1,5070 en donde encontró soporte en una zona importante.
Desde allí está experimentando una leve recuperación en la jornada del miércoles. La suba aún no fue suficiente para cambiar el momento débil de corto plazo.
Al igual que el EUR/USD las recuperaciones se siguen mostrando frágiles. Para romper dicha fragilidad el GBP/USD necesita consolidarse por encima de 1,5250 lo que enviaría una importante señal alcista.
De perder, 1,5070 las bajas deberían de extenderse, posiblemente rumbo a 1,5000/10, en donde se encuentra otro soporte. De perder este último, las formaciones de cambio de tendencia que estaba intentando formar el par quedarían invalidadas.
En términos de día, el GBP/USD cerró el martes en una zona de soporte relevante y que puede haber dado señales contradictorias. De haber finalizado bien por debajo de 1,5100, la recuperación desde los mínimos hubiera entrado en zona de riesgo. Por ahora, ha evitado marginalmente sostenerse en gráficos de día por encima de la media móvil de 20 sesiones.