La libra va camino a tener un cierre semanal sin grandes cambios contra el dólar. A diferencia del EUR/USD y del USD/CHF no pudo conseguir niveles no vistos en años. La zona clave sigue siendo 1,6300. Nuevamente el par se aproximó a ese nivel y no lo pudo superar.
La próxima semana será un nuevo desafío relevante para ver si finalmente puede quebrarlo y consolidarse por encima o no. De poder hacerlo, se abrirán las puertas para una suba mayor. Si llegará a producirse, podrían ocurrir recorridos extremos ya que se puede suponer que hay varias órdenes en la zona entre 1,6300 y 1,6340.
La tendencia de mediano plazo se mantiene alcista con soportes claves en 1,5880 y 1,5710.