Este jueves se reúne el Banco Central Europeo -BCE-, en un evento para el que los expertos encuestados por Bloombergesperan que anuncie un nuevo retraso en el final del programa de compras de deuda –QE-.
El plan actual de la entidad es que finalice en marzo de 2017, pero las dificultades para conseguir que la inflación se estabilice en el entorno del 2% apuntan a que Draghi volverá a ampliar el plazo: 4 de cada 5 analistas encuestados cree que el economista italiano ampliará los estímulos, y que su medida más probable será retrasar el fin de las compras. ¿Cuando lo hará? Los expertos creen que será en la reunión de septiembre, dentro de dos días, aunque la expectativa de que sea en esta ocasión se ha visto reducida desde la última encuesta, cuyos resultados se recogieron el pasado 18 de julio: entonces lo pensaba un 71% de los encuestados y ahora lo cree un 54%.
Esta no será la única medida que tomará el BCE el jueves. De todos los analistas encuestados, la mayor parte cree que en septiembre también se tocarán los parámetros del QE, llevando a cabo dos medidas: eliminar la norma por la cual la entidad sólo puede comprar deuda con rentabilidades superiores a la facilidad de depósito -ahora en el -0,4 %-, además de ampliar directamente la cantidad de bonos que puede comprar de cada emisor, hasta ahora establecida en un tercio del total disponible.
‘Brexit’ y nuevas perspectivas
Uno de los factores que hacen que esta reunión sea especialmente destacable es que será la primera vez en la que el BCE revise sus perspectivas de crecimiento e inflación para la eurozona después de que tuviese lugar el Brexit. En este momento, las estimaciones del BCE para el crecimiento económico se mantienen en un 1,6% para 2016 y 1,7% para los dos años siguientes, unos porcentajes que sólo variarán para el año 2017: los analistas consideran que los revisará a la baja, aunque no se especifica cuánto.
No hay que olvidar que Draghi ya se pronunció en su momento sobre los efectos de la salida del Reino Unido de la eurozona, explicando que reduciría en 0,5 puntos el crecimiento para los próximos 3 años.
En cuanto a la inflación, para la que se espera que avance a un ritmo medio del 0,2% este año, 1,3% en 2017 y 1,6% en 2018, los analistas encuestados creen que no habrá ningún cambio en este sentido. Eso sí, en la misma encuesta vuelven a destacar, como ya hicieron en julio, que Draghi será capaz de alcanzar el objetivo del 2% antes de que acabe su mandato, establecido hasta noviembre de 2019.
El regulador explicó sobre el Brexit, en la última reunión de julio -en la que no anunció ninguna medida nueva-, que «no tenemos información para poder tomar decisiones. En este punto no se puede pensar en instrumentos concretos. Cuando tengamos más datos estaremos en una posición mejor para tomar nuevas medidas».
El fin del ‘QE’
La encuesta ha incluido preguntas sobre el tapering -el desmantelamiento paulatino del QE- por primera vez, y los resultados reflejan que al programa todavía le queda un tiempo de vida considerable. La opinión más común, con un 41% del total, es que el tapering se iniciará en algún momento de 2018, o más tarde, mientras que un 22% cree que tendrá lugar en el cuatro trimestre de 2017, el mismo porcentaje lo espera para el tercer trimestre y un 12% considera que será en el segundo trimestre cuando tenga lugar. De media, los expertos creen que el desarme del programa tardará 12 meses.
JPMorgan alerta sobre el ‘tapering’
El banco estadounidense alertó ayer a los inversores sobre las reacciones que pueden experimentar los bonos europeos cuando arranque el desmantelamiento del QE: «Está creciendo la evidencia de que el programa del BCE está tocando sus límites», lo que podría presionar los precios de la renta fija europea, que se mantienen ahora cerca de máximos históricos. Ahora, según se explica desde Bloomberg, JPMorgan recomienda a los inversores que reduzcan sus posiciones en los bonos periféricos de Europa.
Fuente: eleconomista.es