Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE), visita este miércoles Madrid.
El organismo ha publicado hoy su último Informe de Estabilidad Financiera y ha advertido de que aumentan los riesgos de sostenibilidad de la deuda en medio de la revaluación de los mercados de bonos y de la incertidumbre política en algunos países.
El último Informe de Estabilidad Financiera del Banco Central Europeo (BCE), publicado este miércoles, subraya que los «indicadores sistémicos de estrés» han permanecido bajos en los últimos seis meses, aunque apunta que sigue existiendo el riesgo de un repunte rápido en los mercados mundiales de renta fija. En la zona euro, precisa, esto podría materializarse a través de efectos indirectos derivados de mayores rendimientos en otras economías avanzadas, en particular Estados Unidos. «A medida que los inversores mantienen sus inversiones en renta fija, se exponen a un mayor riesgo», apunta el organismo.
También persisten vulnerabilidades «significativas» para los bancos de la zona euro, según el BCE. La presión del mercado sobre los bancos disminuyó en los últimos seis meses, y los precios de las acciones aumentaron considerablemente. Los bajos tipos de interés, sin embargo, siguen desafiando la rentabilidad de los bancos, subraya el último Informe de Estabilidad Financiera del BCE. Añade que, en algunas regiones, las perspectivas de rentabilidad para las entidades financieras siguen siendo moderadas por las grandes existencias de préstamos improductivos (NPL, por sus siglas en inglés). «Una serie de retos estructurales también influyen en las perspectivas de rentabilidad de los bancos, como la sobrecapacidad, la limitada diversificación de los ingresos y la ineficiencia de costes«, añade.
El riesgo de que los problemas de sostenibilidad de la deuda puedan volver a surgir se ha revisado al alza desde la última revisión de la estabilidad financiera publicada en noviembre de 2016. La recuperación económica en curso de los últimos seis meses ha respaldado las perspectivas de sostenibilidad de la deuda soberana de la zona euro. Un periodo prolongado de incertidumbre (geo) política podría, sin embargo, obstaculizar el crecimiento económico y conducir a primas de riesgo más altas. Esto aumentaría los costes de financiación y podría generar inquietudes sobre la sostenibilidad de la deuda en algunos países.
Los riesgos derivados de niveles elevados de deuda también están presentes en el sector privado no financiero, dados los altos niveles de endeudamiento del sector empresarial no financiero de la zona del euro, tanto por razones históricas como internacionales. Asimismo, el BCE advierte de que los riesgos para la estabilidad financiera de la zona euro también se derivan del sector financiero no bancario. Los fondos de inversión han crecido rápidamente en los últimos años y tienen el potencial de ampliar los riesgos de estabilidad financiera. Estas vulnerabilidades están estrechamente vinculadas al riesgo de un repunte abrupto en los mercados de bonos.
Con todo, el BCE identifica cuatro riesgos principales para la estabilidad financiera de la zona euro para los próximos dos años:
1. Revaluación de los mercados globales de renta fija (riesgo sistémico medio. Sin cambios respecto a su última revisión).
2. Relación negativa entre la debilidad de la rentabilidad bancaria y el bajo crecimiento nominal, en medio de los retos estructurales en el sector bancario de la zona euro (riesgo sistémico medio. Sin cambios respecto a su última revisión).
3. Sostenibilidad de la deuda pública y privada en medio de una potencial repreciación en los mercados de bonos y de la incertidumbre política en algunos países (medio sistémico medio. En aumento desde la última revisión).
4. Riesgos de liquidez en el sector financiero no bancario con posibles efectos indirectos en el sistema financiero más amplio (riesgo sistémico potencial, sin cambios respecto a la última revisión).
Fuente: bolsamania.com