El cierre de la cotización del lunes por debajo de $1,650 le abrió las puertas a un descenso mayor, lo que llevaría al preciado metal a probar el próximo soporte relevante en $1,6250.
Los indicadores técnicos también favorecen una continuación bajista. Aunque el CCI en gráficos de día se está aproximando a niveles extremos, lo que sugiere que en breve debería de haber una pausa, que puede o no estar acompañada de recuperación.
En caso de subir por encima de $1,690 la cotización experimentaría una aceleración alcista, que llevaría al precio de regreso por encima de $1,700.