La incertidumbre en torno al abismo fiscal pesó sobre Wall Street. En un momento los principales índices retrocedían más del 1%, pero luego resucitaron las esperanzas de un acuerdo y las acciones recortaron pérdidas. En este marco el dólar cerró sin grandes cambios en el mercado en una jornada con vaivenes. El yen de nuevo fue la de peor rendimiento en el mercado seguida por la libra.
Un nuevo día y la costumbre de los últimos días se repitió: el yen alcanzó nuevos mínimos en meses a lo largo del mercado. ¿Seguirá la historia el viernes?
En el mercado de divisas, si bien los recorridos se movieron en sintonía con el dólar lo hicieron con diferente intensidad. Esto llevó a que a colocación de los distintos pares en algunos casos tenga grandes diferencias. Por caso: mientras el EUR/USD se aproximó a la zona de 1,3300 (resistencia importante), tanto el AUD/USD como el NZD/USD cayeron a probar los mínimos de la semana, cotizando bastante lejos de los máximos del mes.
Las monedas ligadas a commodities habían comenzado la sesión europea con momento a favor, pero luego perdieron terreno. Sobre el cierre del día se alejaron de los mínimos. De sostenerse por encima de los mismos, se podría suponer que estarían preparando una recuperación mayor. Pero, el posible quiebre de importantes soportes sigue latente.
La debilidad de la libra llegó a que el EUR/GBP se consolide por encima de 0,8200 y que el GBP/USD cierre el día en torno a 1,6100 (el cierre diario más bajo desde el 10 de diciembre).
El panorama para el último día de la semana muestra al dólar aún con momento, pero ya mostrando dificultades en continuar el rally. De todas formas, la suerte del mercado de divisas parece estar atada a lo que hagan los legisladores estadounidenses y a algún posicionamiento de fin de año. Un acuerdo fiscal no impulsaría necesariamente al dólar, sino al resto de las monedas a través de una mayor demanda por activos más riesgos (lo que haría que el dólar se beneficie contra el yen).
Lo que dejó el jueves…
Mientras el USD/JPY sigue marcando máximos en meses cada día, el Nikkei, el índice de la bolsa de Tokio también: tuvo el cierre más alto desde marzo de 2011.
Los pedidos de subsidio de desempleo en EE.UU. se redujeron la pasada semana en 12.000 hasta 350.000, siendo este un dato mejor al que se esperaba. Esto mantiene las expectativas de recuperación del mercado laboral.
En el lado negativo de los datos la confianza del consumidor retrocedió en diciembre al nivel más bajo en cuatro meses al descender hasta 65,1 desde 71,5. La principal causa citada por la caída es el abismo fiscal.
El indicador de volatilidad, también conocido como índice del miedo (VIX del CBOE) superó los 20 puntos por primera vez desde julio.
Las acciones en EE.UU. registraron la cuarta caída consecutiva. El cierre se produjo lejos de los mínimos del día gracias a un plan presentado por Obama y a la convocatoria para el domingo a los legisladores de la Casa de los Representantes (se encuentran de vacaciones).